¿Qué es Autocompasión y cómo practicarla?

Desde hace tiempo he escuchado la idea de que necesitamos prestarle atención a cómo atendemos y tratamos a nuestros seres queridos cuando están pasando por un momento difícil, y luego intentar aplicarlo con nosotros mismos. ¿Es sencillo? No. Pero ya tienes una prueba de que logras hacerlo con otros, y puede ser muy provechoso practicarlo contigo mismo. 

Sin embargo, tener compasión implica notar que el otro está sufriendo, empatizar y permitirse sentir conmovido por lo que el otro está afrontando. Según la RAE, la compasión es el sentimiento de pena, de ternura y de identificación ante los males de alguien. 

Cuando esto ocurre, se siente deseo de ayudar a la persona que sufre, calidez y cariño. Tener compasión también significa ofrecer comprensión y amabilidad a los demás cuando fallan o cometen errores, en lugar de juzgarlos con dureza. Finalmente, cuando sientes compasión por otro (en lugar de lástima), significa que te das cuenta de que el sufrimiento, el fracaso y la imperfección son parte de la experiencia humana.

La autocompasión implica actuar de la misma manera contigo mismo cuando estás pasando por un momento difícil, fallas o notas, algo que no te gusta de ti. En lugar de simplemente ignorar el dolor con una mentalidad rígida, se vale detenerse para decirse a sí mismo «este momento que estoy afrontando es difícil para mí», ¿cómo puedo consolarme y ayudarme ahora?

En lugar de juzgarte y criticarte sin piedad por varias insuficiencias o defectos, la autocompasión significa que eres amable y comprensivo cuando te enfrentas a fallas personales; después de todo, ¿quién dijo que se suponía que eras perfecto?

Puedes tratar de cambiar de manera que le permita ser más saludable y feliz, pero esto se hace porque te preocupas por ti mismo, no porque seas inútil o inaceptable. 

Quizás lo más importante, tener compasión por ti mismo significa que honras y aceptas tu humanidad. 

  • Las cosas no siempre saldrán como uno quiere. 
  • Encontrarás frustraciones, ocurrirán pérdidas, cometerás errores, chocarás con tus limitaciones, no alcanzarás tus ideales. 
  • Esta es la condición humana, una realidad compartida por todos nosotros. 

Cuanto más abras tu corazón a esta realidad en lugar de luchar constantemente contra ella, más podrás sentir compasión por ti mismo y por todos tus semejantes en la experiencia de la vida.

¿Cómo practicar la autocompasión?

Si llegaste hasta acá, te felicito. Noto que quieres cuidarte y aprender a comprender lo que ocurre contigo, para acompañarte de una manera más saludable ante tus imperfecciones inherentes por ser humano. En esta oportunidad te compartiré algunos ejercicios simples para practicar la autocompasión, al realizarlos es importante tener en cuenta 3 elementos importantes: 

  1. Evitar los juicios 
  2. Reconocer cuando tomamos actitudes de aislamiento 
  3. Permitirnos sentir

Ejercicio 1: ¿Cómo tratarías a un amigo?

¿Cómo crees que podrían cambiar las cosas si te respondieras a ti mismo de la misma manera que normalmente respondes a un amigo cercano cuando él o ella está sufriendo? 

Primero, piensa en los momentos en que un amigo cercano se siente realmente mal consigo mismo o realmente está luchando de alguna manera. ¿Cómo le responderías a tu amigo en esta situación (especialmente cuando estás en tu mejor momento)? Escribe lo que sueles hacer, lo que dices y ten en cuenta el tono en el que sueles hablar con tus amigos.

Ahora piensa en los momentos en que te sientes mal contigo mismo o estás luchando. ¿Cómo respondes típicamente a ti mismo en estas situaciones? Escribe lo que sueles hacer, lo que dices y ten en cuenta el tono en el que te hablas a ti mismo.

¿Notaste alguna diferencia? Si es así, pregúntate por qué. ¿Qué factores o miedos entran en juego que te llevan a tratarte a ti mismo y a los demás de manera tan diferente?

Escribe cómo crees que podrían cambiar las cosas si te respondieras a ti mismo de la misma manera que normalmente respondes a un amigo cercano cuando estás sufriendo.

Ejercicio 2: Explorando la autocompasión a través de la escritura

Todo el mundo tiene algo de sí mismo que no le gusta; algo que les hace sentir vergüenza, sentirse inseguros o no ser “suficientemente buenos”. Este ejercicio te ayudará a escribirte una carta a ti mismo sobre este tema desde un lugar de aceptación y compasión.

Primera parte: ¿Qué imperfecciones te hacen sentir inadecuado?

Todo el mundo tiene algo de sí mismo que no le gusta; algo que les hace sentir vergüenza, sentirse inseguros o no ser “suficientemente buenos”. La condición humana es ser imperfecto, y los sentimientos de fracaso e insuficiencia son parte de la experiencia de vivir una vida humana. Trata de escribir sobre un problema que tengas y que tienda a hacerte sentir inadecuado o mal contigo mismo (aspecto físico, problemas laborales o de pareja…) ¿Qué emociones te surgen cuando piensas en este aspecto de ti mismo? Trata de sentir sus emociones exactamente como son, ni más ni menos, y luego escriba sobre ellas.

Segunda parte: Escríbete una carta a ti mismo desde la perspectiva de un amigo imaginario que te ama incondicionalmente

Ahora piensa en un amigo imaginario que ama incondicionalmente, acepta, es amable y compasivo. Imagina que este amigo puede ver todas tus fortalezas y todas tus debilidades, incluido el aspecto de ti mismo sobre el que acabas de escribir. Reflexiona sobre lo que este amigo siente por ti y cómo eres amado y aceptado tal como eres, con todas tus imperfecciones muy humanas. Este amigo reconoce los límites de la naturaleza humana y es amable e indulgente contigo. En su gran sabiduría este amigo entiende la historia de tu vida y los millones de cosas que han pasado en tu vida para crearte como eres en este momento. Tu insuficiencia particular está relacionada con muchas cosas que no elegiste necesariamente: tus genes, tu historia familiar, las circunstancias de la vida, cosas que estaban fuera de tu control.

Escríbete una carta a ti mismo desde la perspectiva de este amigo imaginario, centrándote en la insuficiencia percibida por la que tiendes a juzgarte. ¿Qué te diría este amigo sobre tu “defecto” desde la perspectiva de la compasión ilimitada? ¿Cómo transmitiría este amigo la profunda compasión que siente por ti, especialmente por el dolor que sientes cuando te juzgas tan duramente? ¿Qué escribiría este amigo para recordarte que solo eres humano, que todas las personas tienen fortalezas y debilidades? Y si crees que este amigo sugeriría posibles cambios que deberías hacer, ¿cómo serían estas sugerencias, sentimientos de comprensión y compasión incondicionales?

Ejercicio 3: toque de apoyo

En este ejercicio, aprenderá cómo activar su sistema nervioso parasimpático mediante el uso del tacto de apoyo para ayudarlo a sentirse tranquilo, cuidado y seguro.

Cuando notes que estás bajo estrés, toma respiraciones profundas

Coloca suavemente una o ambas manos sobre tu corazón, sintiendo la suave presión y el calor.

Siente el toque de tu mano en tu pecho.

Siente el ascenso y descenso natural de tu pecho al inhalar y al exhalar.

Quédate con la sensación todo el tiempo que quieras.

Si crees que el pecho no funciona, permítete explorar en qué parte de tu cuerpo un toque suave resulta relajante.